lunes, 23 de septiembre de 2013

¡Llegará el momento en que se estamparán símbolos satánicos en los objetos sagrados!

- Mensaje nº 283 -

Hija mía. Hija mía. Ahora has vuelto. Sí, hija Mía. Ahora amanecen los malos tiempos, Jesús será alejado de ti , pero tú que Le amas seguirás llevándole en tu corazón. El Cielo estará abierto para ti y unidos Nosotros te ayudaremos. Pídenos y así será.

Hija Mía. Di a todos Nuestros hijos que nadie, por muy malvado que sea, puede arrebatar a Jesús a Nuestros hijos creyentes y fieles. El Hijo del Señor, Nuestro Padre, vive en vuestros corazones y así será siempre. No obstante, recoged vuestros objetos sagrados, libros, velas, informes y revistas, vuestras estatuas sagradas, imágenes, cruces y lo que tengáis, porque ahora llegará el momento en que todo será (¡y será!) profanado y se estamparán símbolos satánicos en los objetos sagrados.

Pocos se darán cuenta de ello, pero así será. ¡Además, hay demasiados «hombres de Dios» en vuestras iglesias que se dejarán llevar por los ultrajes de la bestia y os bendecirán a vosotros y a vuestros objetos devocionales no con la bendición divina cristiana, sino (¡torcida!) con la satánica!

Hijos, debéis estar en guardia, porque la bendición satánica puede causar daño . Puede traeros enfermedades y contiendas, así que ¡cuidado con lo que está a punto de suceder en vuestras Santas Misas!

Pedid al Padre claridad y pureza y que os salve de esas «bendiciones» que no lo son. Son malos tiempos los que se avecinan, pero quien lleve a Jesús en su corazón estará protegido. Su alma se salvará, no importa lo que traman los «otros».

Por eso, hijos míos, permaneced fieles a vuestro Señor y Salvador, ¡pues Él vendrá a redimiros!

Él os liberará de la esclavitud de la bestia, ¡y ÉL os seguirá dando alegría, felicidad y gozo incluso en el mayor de los males!

¡Permanece fiel a Él, el único Señor y Dios verdadero! Da y repite tu Sí a Jesús, y reza tus rosarios, que te enseñó la Virgen. Te quiero.

Tu San Buenaventura.

Hija mía. Da a conocer ambos mensajes. Te amo. Tu San Buenaventura. Amén.

"Incluso en los días más oscuros estaré con aquel que Me ame fervientemente.

Mi luz brillará en su corazón, y la alegría y el amor le inundarán.

Todos los sufrimientos que puedan sobrevenirle los soportaré por él, pues tan grande es Mi amor y Mi gratitud hacia los que Me aman sinceramente. Amén.

Tu Jesús".