jueves, 11 de diciembre de 2014

Mensaje de la Santísima Virgen María

A Su Amada Hija Luz De María. Dado en México, Basílica de Nuestra Señora de Guadalupe.

Yo os bendigo a todos. Todos vosotros sois Mis hijos... sin distinción, sin límites y sin fronteras. Os amo a todos y os protejo con Mi Manto Materno.

Amados Míos:

Desde Aquí, Desde Mi Casa En El Tepeyac... Bendigo A Toda La Humanidad A La Que Miro Con Dolor, Caminando Sin Dirección, Apresuradamente Hacia Los Acontecimientos Sin Ser Consciente De Lo Que Viene.

Amadísimos Hijos

Soy Coronada Como Emperatriz De Las Américas Pero Deseo Mi Corona Sobre Cada Uno De Vosotros, En Vuestra Entrega Y En Vuestras Ofrendas A Mi HIJO.

Mi amado pueblo, el pueblo mexicano:

Os llamo a permanecer en el Amor de Mi Hijo. Mis verdaderos hijos no levantan la mano contra sus hermanos. Ofreced el dolor por la conversión de toda la humanidad. Mantened la calma. En este instante, el ajetreo en el que vive la humanidad sume el corazón del hombre en una lucha constante contra sus semejantes.

SER Testimonio De La PAZ De Mi Hijo .. . SER La Voz Que Tanto Anhela Mi Corazón,

ESA Voz Que Se Eleva Llamando A Todos A La Conversión.

Hijos, ¡os amo intensamente! Os bendigo con todo el esplendor de Mi Corazón que brilla hasta el infinito alimentando los rayos del Sol y poniendo en cada uno de vosotros esa luz que en este instante necesitáis para evitar que os envolváis con la violencia, consecuencia de la falta de conciencia en el hombre, consecuencia de vuestro desapego de Mi Hijo y consecuencia de la falta de humildad.

El hombre en su afán de conocimiento, aunque no precisamente para el bien, se ha lanzado a competir con Mi Hijo y Yo, como Madre, os llamo de nuevo a que seáis conscientes, penséis y razonéis que sois criaturas limitadas de Dios y no podéis ser superiores al Maestro de la Creación; en cambio atentáis contra el Don de la Vida creando enemistad entre los hombres, y esa enemistad se convertirá en violencia y la violencia en guerra.

Amadísimos:

DESDE Mi Casa En El Tepeyac, Desde Mi Santuario, Con Mi Manto Protejo Toda

LA CREACIÓN Y Con Las Estrellas Impresas En Él, Ilumino Las Almas De Aquellos Que Se Ofrecen A Mi Hijo Y Son Afectos A Esta Madre, Intercesora Y Abogada De Todos Los HOMBRES.

Una vez más os invito a prepararos...

¡Cuántos de Mis hijos piensan que porque el cumplimiento de las advertencias del Cielo no es a nivel global, en tiempo humano, pueden continuar la vida inmersos en el pecado! Pero hijos, el día no basta, no es suficiente; vivís sin mirar en vuestro interior ni un solo instante, todo lo que se está gestando en cada uno de los Países.

Amados Míos:

¡Hace tanto tiempo que os llamé a prestar atención a la ECONOMÍA MUNDIAL! Y en este instante en que la economía está a punto de colapsar, Mi Llamada es para que Mis fieles dupliquen su oración y sus ofrendas voluntarias por todos aquellos que continúan su vida basados en el dios dinero, que ante una inminente caída de la economía, se sentirán devastados, perderán su vida por voluntad propia, por ser débiles, por no tener su Fe basada en la Divina Providencia.

Vosotros Mis amados:

No vaciléis ni un instante, no vaciléis y no dudéis. Sabéis que Mi Hijo no promete en vano y ha prometido ayuda desde Su Casa a todos los fieles, y Yo, como Madre de toda la humanidad, en Mi Tilma (manto) os guardo a todos, absolutamente a todos.

Vosotros, amados hijos, mirad hacia el cielo, no olvidéis que la Mano de Mi Hijo caerá sobre la Tierra con Su pronta Justicia. Pero en todo instante, con Su infinita Misericordia Mi Hijo exhala Su Aliento Divino sobre toda la humanidad y la criatura humana recibirá la ayuda que Mi Hijo traerá sin demora, a medida que se la gane.

Están surgiendo instantes dolorosos para la Iglesia de Mi Hijo. Continuad manteniendo fuerte vuestra Fe y confiad en Mí. Mi Hijo me ha nombrado Defensora de Su Iglesia y Yo, como Emperatriz de las Américas, he acogido a todos.

Amados hijos:

Encontrad ese silencio interior; esa Paz que buscáis fuera de vosotros mismos, salid de la rutina diaria que os transforma en criaturas despersonalizadas, inmersas en una continua repetición de las acciones de vuestros hermanos sin considerar las consecuencias de estas acciones.

Deseo Que Todos Escuchen Mi Llamada, Y Que El Día 12 De Diciembre A Las 3:00 De

LA TARDE Clamen La Divina Misericordia, Recen La Coronilla De La Divina Misericordia Y

DESPUÉS Rezad El Santo Rosario. Ofrécelo A Esta Madre Y Yo Derramaré Bendiciones Sobre Toda La Humanidad, Especialmente Sobre Aquellos Que Deseen Recibir Las Gracias Que Yo Enviaré.

Hijos, estos son instantes de urgencia, estáis viviendo el instante del último instante. Acercaos a Mi Hijo y alimentaos del Sustento Divino. La fuerza se duplicará si sois conscientes de que Mi Hijo permanece vivo y presente en el Banquete Eucarístico.

Sigo mirando a toda la humanidad y todas Mis Legiones de lo Alto miran a la humanidad, ven cómo rechazáis a Mi Hijo y Sus Enseñanzas, y ven cómo Me despreciáis y Me anuláis. Os Suplico Que Toméis Un Instante De Vuestras Vidas Y Penséis Qué Sería De Vosotros Si Mi Hijo No Permaneciera En Cada Uno De Sus Hijos.

Amados:

Vosotros que deseáis ser los últimos y dar el primer lugar a vuestros hermanos...

Vosotros que al acercaros a Mi Hijo no despreciáis a vuestros hermanos...

Vosotros que no juzgáis a vuestros hermanos sino que sois conscientes de que Mi Hijo es el único que puede emitir un juicio...

Vosotros que oráis ante el Tabernáculo...

Tú que rezas y dices eres fiel...

Sed Los Que En Todos Los Instantes Permanezcáis En El Último Lugar, No Emitáis Juicio. ESTOS Instantes Son Muy Difíciles; El Enemigo Del Hombre Se Está Apoderando Del Pensamiento Humano. Sed Humildes Y Aceptad Mis Llamadas.

Yo, como Madre de todos, os invito a orar por Mi Pueblo Mexicano para que allí reine la paz y Mis hijos no levanten la mano contra el Don de la Vida de sus semejantes. Os invito a rezar por Inglaterra, llorará ante las acciones del terrorismo.

Amadísimos Míos:

Yo no desprecio a ninguno de Mis hijos, incluso aquellos que no Me aman son Mis hijos y por eso les llamo constantemente.

Os bendigo especialmente en este instante de fiesta de la humanidad a esta Madre que os protege en cada instante, porque sois el tesoro que corona a esta humilde Madre que os ama infinitamente.

Que Mi Bendición Sea Sobre Cada Uno De Vosotros, Y Vosotros Que Sois Conscientes De Mi Llamada,

COMPARTE Mi Bendición Con Tus Hermanos. Mantened La Paz De Mi Divino Hijo En Vuestros Corazones.

Yo Os Bendigo,

Madre María, Madre de Guadalupe.

SALVE María Purísima, Concebida Sin PECADO.

SALVE María Purísima, Concebida Sin PECADO.

SALVE María Purísima, Concebida Sin PECADO.