sábado, 2 de septiembre de 2017

Sábado, 2 De Septiembre De 2017

Sábado, 2 de septiembre de 2017:

Jesús dijo «Pueblo mío, habéis oído la expresión de que la Tierra Prometida es un lugar de leche y miel para describir un lugar de abundancia. Pueblo mío, cuando estéis en Mis refugios, agradeceréis tener cualquier alimento, y más si es de vuestro agrado. Estás viendo qué alimentos funcionan mejor para el desayuno, la comida y la cena. Incluso estás viendo cómo hacer pan en tu horno de propano. Has tenido algunos problemas al intentar trasladar con seguridad tu retrete, así que necesitarás unos profesionales de la mudanza, y ver qué tipo de equipo para elevarlo sobre ruedas necesitarías. También deberías seguir investigando cómo perforar un pozo para el agua de lavado. Deberías enumerar muchos de tus problemas para tener mejores luces para la noche. Confía en Mí que esta experiencia te ha servido para ver tus necesidades».

Jesús dijo «Pueblo mío, tienes en la memoria muchas escenas de destrucción del huracán Harvey, y puedes imaginar lo difícil que será para tu pueblo de Texas recuperarse de semejante pérdida de casas y coches. Es la primera gran tormenta que azota vuestro continente en mucho tiempo. Este no es el final de la destrucción que caerá sobre tu nación. Estáis en el punto álgido de la temporada de huracanes y se avecinan más tormentas. Tu gobierno no ha podido avanzar mucho en ninguna de tus leyes. Tu agenda cambiará a una de restauración de toda tu destrucción. Con todos tus problemas en curso, puede que te enfrentes a algunos activistas o terroristas que podrían estar causando más destrucción. Se aprovecharán de las divisiones entre razas, inmigrantes y liberales contra conservadores. Debido a que muchas personas no están viniendo a Mí en oración y amor, están eligiendo los caminos del hombre que son estilos de vida pecaminosos. Toda la destrucción que os he mostrado, es el castigo que vuestro pueblo está cosechando por vuestras vidas de pecado mortal. Primero seréis probados por Mi experiencia de Advertencia. Después soportaréis un mal que aún no habéis visto, cuando Mis fieles estarán agradecidos de tener Mi refugio para su protección y supervivencia. Os alegraréis de tener cualquier alimento cuando podáis enfrentaros a la inanición. Estaréis viviendo un Éxodo moderno, y os enfrentaréis a una prueba de fe en cómo Yo os proveeré. Agradéceme todo lo que hago por ti cada día».