Mensajes para John Leary en Rochester NY, EEUU
martes, 10 de marzo de 2009
Martes, 10 de marzo de 2009

Jesús dijo: “Mi gente, les estoy dando un mensaje de amor por lo mucho que amo a todos, incluso a aquellos que no Me aman. Pueden ver Mi amor en que sufrí y morí en una cruz para redimir todos sus pecados. Les doy Mi amor incondicional porque todos ustedes son Mis creaciones y soy un ejemplo para que también amen a todos. Necesitan esforzarse por amar incluso a sus enemigos, si quieren trabajar hacia su perfección. Hijo Mío, quiero que enseñes Mi amor por Mi gente, así como cualquier preparación que sea necesaria para la tribulación. Cuando todos vean Mi amor, sabrán por qué haré grandes esfuerzos para hacer lo imposible para protegerlos de los malvados en Mis refugios y proveer para sus necesidades. Es lo más importante que oren y Me den culto todos los días. Por eso, si no tienen un sacerdote para la Misa en el refugio, Mis ángeles les darán su Pan de Comunión diario para que pueda unirme a ustedes en todas sus pruebas. Cuando vean la hambruna mundial, la división en Mi Iglesia, los chips obligatorios en el cuerpo, la ley marcial y el virus pandémico, sabrán que es hora de llamarme, y su ángel guardián los guiará con una señal física al refugio más cercano. Regocíjense de que serán invisibles a los malvados en el camino a su refugio. Todo lo que necesiten será provisto, así que tengan plena confianza y fe en que yo los estoy cuidando. Sepan de nuevo que es por amor que estoy con ustedes siempre en Mi Presencia Real en Mi Hostia.”
Jesús dijo: “Mi gente, durante la Cuaresma han estado leyendo partes del Libro del Éxodo tanto en la Misa como en la Liturgia de las Horas. Un buen proyecto de estudio bíblico sería leer todo el Libro del Éxodo para que puedan ver todos los detalles de las diversas partes que están leyendo. Están conduciendo a la Semana de la Pasión, que tiene un gran paralelo con la Pascua de Egipto y Mi Última Cena antes de convertirme en el Cordero sacrificado por toda la humanidad. La Cena Pascual de pan sin levadura se convirtió en Mi Cuerpo, y el vino se convirtió en Mi Sangre en la primera Misa. Esta fue la institución de Mi Eucaristía que comparten en cada Misa diaria. Cuanto más lean sobre el Éxodo de Egipto, más verán esto como el presagio de por qué vine a la tierra para salvarlos a todos de sus pecados. Incluso algunas de sus viejas películas pueden darles la sensación de vivir durante el Éxodo y Mi tiempo en la tierra. Den alabanza y gloria a Dios por darles este regalo de su salvación.”
Origen: ➥ www.johnleary.com
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