viernes, 9 de julio de 2021

Mensajes de Nuestra Señora Reina y Mensajera de la Paz y Santa Verónica Giuliani, comunicados al vidente Marcos Tadeu Teixeira

Con el Rosario se puede vencer al malvado Satanás. ¡Con el Rosario se puede conquistar el Infierno!

DIA DE SANTA VERÓNICA GIULIANI

Mensaje de Nuestra Señora Reina y Mensajera de la Paz

«Mi querido hijo Marcos, hoy vengo del Cielo con Mi hija Verónica Giuliani, para bendecirte, para bendecir al padre que te di y a quien tanto amo, para bendecir a Mis hijos aquí presentes y al mundo entero.

Sí, cuánto Me ha amado y agradado Mi hija Veronica Giuliani con su vida. Cuántas almas Me ayudó a salvar y a llevar al Cielo. Su vida fue un acto perfecto de amor, un acto continuo de amor por Mi hijo Jesús y por Mí.

Ella fue verdaderamente una llama incesante de amor y todos los que la imiten se convertirán también en llamas incesantes de amor.

Seguid a Mi hija Veronica Giuliani por el camino de la oración, del sacrificio, aceptando con amor todos los sufrimientos que el Señor permite y ofreciéndolo todo por la salvación de los pecadores.

Seguidla siendo rosas místicas, rosas amarillas de reparación y penitencia, sufriendo y ofreciéndolo todo en reparación por los pecados de la humanidad. Entonces, Mi hijo Jesús derramará sobre vosotros todas las gracias de amor de Su Sagrado Corazón y dará también a toda la humanidad: la paz, Su bendición y la restauración de todas las cosas que han sido destruidas por el maligno.

¡Reza el Rosario todos los días! Con el Rosario se puede vencer al malvado Satanás. ¡Con el Rosario se puede vencer al infierno!

Os bendigo a todos con amor y especialmente a ti, mi querido hijito Marcos. Muchas gracias por esta película de la vida de mi hija Verónica Giuliani que hiciste hace tanto tiempo, con tanto esfuerzo, tanta dedicación, olvidándote de ti mismo.

Sí, mientras la mayoría de la gente sólo buscaba la satisfacción de sus deseos, el cumplimiento de sus deseos egoístas, tú dedicaste todo tu tiempo a hacer esta película de mi hija Verónica, para darla a conocer y hacerla amar, y para que todos, especialmente los niños y los jóvenes, la siguieran por el camino del amor a Dios, de la entrega total y de la consagración de la vida al Señor, que tantas gracias y bendiciones atrae al mundo, ahuyenta y anula tantos castigos, y aplasta el poder del Infierno.

Sí, habéis conseguido encender el corazón de muchas almas por el Señor, por mí, y habéis conseguido hacer brotar en el corazón de algunos de mis hijos el deseo de la vida consagrada y religiosa.

Sí, por todo esto te doy las gracias, hijo mío, ¡este mérito es todo tuyo! Y por eso te doy hoy 67 bendiciones especiales, y a tu padre Carlos Tadeu, le doy ahora 112 mil bendiciones que recibirá todos los años en la Fiesta de Mi hija Verónica Giuliani.

También daré hoy a 3 personas de tu elección 4 bendiciones especiales. Sí, así recompenso tu fe, tu amor, tu entrega total a Mí con todas Mis gracias.

Os bendigo a vosotros y a todos Mis hijos: de Lourdes, de Montichiari, de Castello y de Jacareí».

Mensaje de Santa Verónica Giuliani

«Amado hermano Marcos, amado hijo del Señor, vengo de nuevo del Cielo para bendecirte y decirte:

Yo, Verónica, ¡te amo con todo mi corazón! Te amo con todas mis fuerzas, nunca te dejaré, nunca te abandonaré. Gracias por hacer esta película de mi vida.

Sí, te he esperado, amado hermano, durante tantos siglos. He esperado a que nacieras, para que me sacaras del olvido y del desprecio de la humanidad.

Sí, el demonio no ha conseguido detenerme en mi ascenso a la santidad, el demonio no ha conseguido desanimarme, no ha conseguido detenerme, ni siquiera poniendo en mi contra a las personas más cercanas a mí.

Incluso en la vida religiosa, no consiguió desanimarme cuando incitó a mi padre, aunque católico y fiel, a oponerse a mi vocación. No pudo derrotarme en vida. Así que intentó derrotarme después de la muerte, haciendo que mi vida cayera en el olvido y el desprecio de la humanidad.

Sí, esperé muchos siglos el nacimiento del niño elegido para sacarme del olvido y del ocultamiento, y para hacerme brillar ante toda esta humanidad que ahora nos necesita a nosotros, los Santos, necesita más que nunca nuestros ejemplos.

Yo soy la medicina celestial para esta generación, mi vida llena de ejemplos de santidad es la medicina celestial que esta generación necesita para salvarse. Y esta medicina, mi vida, la habéis dado en abundancia a todos mis hermanos, haciendo esta película de mi vida.

Y todo el que me imite siguiendo el camino de la oración, del sacrificio, de la penitencia, de la santidad, del amor a Dios, dedicando su vida totalmente al Señor y a la Santísima Madre, será santo, se salvará.

Sí, esta película de mi vida hará que muchos niños, muchos jóvenes amen el amor que se deja encontrar, digan sí al amor que se deja encontrar, dediquen su vida, consagren su vida al amor que se deja encontrar.

Sí, «el amor se deja encontrar», dije en el momento de mi muerte. Se dejó encontrar aquí hace 30 años. Y, sobre todo, se deja encontrar en la película de mi vida que hicisteis.

Todos los que vean esta película encontrarán el amor divino, encontrarán al Señor Jesús, encontrarán su salvación. Por eso, debes dar esta película cada vez más a todos, para que todos puedan encontrar el amor eterno que le salvará.

Gracias por hacer esta película de mi vida, gracias a ti ahora se encuentra el amor a través de mí, el amor eterno.

Gracias a ti ahora tantos de mis hermanos, a los que amo como si también fueran mis hijos, me conocen, me aman, me imitan y me siguen. Y allí donde llega mi vida, allí Satanás es derrotado, porque a través de mí brilla la luz del amor eterno.

Mi querido hermano, este mérito es todo tuyo, ¡todo tuyo! Por eso te doy ahora 98 bendiciones, y para tu padre, que es a quien más amas, le doy ahora 322 mil bendiciones que recibirá cada año el día de mi fiesta.

Así te recompenso beneficiándote no sólo a ti, sino también a quien más amas. Y a todos los peregrinos de este lugar santo que conocen mi vida, que llegaron a amarme después de la película que hiciste, que me rezan con fervor, les doy hoy 3 bendiciones especiales, fruto de los méritos de la película de mi vida que hiciste.

Después de mi aparición elige a 5 personas, bendícelas en mi nombre. Sobre ellas caerá mi gracia, mi bendición de este día.

Y no dejes que nadie te quite ni te robe la alegría, porque grande será tu recompensa en el Cielo por la película que hiciste de mi vida y que tocó tantos corazones y seguirá tocando.

Y por cada alma tocada, se preparará una nueva corona de gloria que se colocará sobre tu cabeza y sobre la cabeza de tu padre en el Cielo, porque él es tu consorte en la gracia y también en el amor.

Volveos cada vez más íntimos, cada vez más unidos, porque cuanto más unidos estéis, más os pareceréis. Y especialmente tú, mi amado hermano e hijo espiritual Carlos Tadeu, serás tanto más semejante al hijo que la Inmaculada te dio, cuanto más íntimos y unidos estéis a él.

¡No tengáis miedo de amaros sin medida! Sed como Jesús y San José. San José no tuvo miedo de amar a Jesús con todas sus fuerzas y el Señor Jesús no tuvo miedo de entregarse a San José sin medida.

La medida del amor es amar sin medida, amar sin límites. Cuanto más os améis así, más se os transmitirá la llama de amor que tiene nuestro amadísimo Marcos, mi amado hermano e hijo.

Y así, más os convertiréis también vosotros en reflejo y semejanza del Corazón Inmaculado de la Madre de Dios.

Te bendigo, queridísimo hermano Carlos Tadeu, con todo mi corazón. Te amo con todas mis fuerzas. Nunca, nunca te dejaré solo. Todos los sábados, a las 9 de la mañana, bajaré del cielo para bendecirte donde quiera que estés. Y derramaré toda mi paz sobre vosotros y os cubriré con mi manto de amor.

Ahora os bendigo a todos con amor, y bendigo también todos estos rosarios que habéis puesto aquí a mis pies.

También bendigo estas imágenes. Dondequiera que vayan, allí estaré con la Madre de Dios, derramando las grandes gracias del Señor.

Os bendigo a todos: de Castello, de Umbría y de Jacareí».

(Marcos) : «Sí, lo haré, Madre.

Sí, lo haré.

Hasta pronto».

Película de la vida de Santa Verónica Giuliani

Vídeo de la Aparición y Mensaje

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