miércoles, 31 de julio de 2019

Mensaje de Nuestra Señora de la Reina y Mensajera de la Paz

Queridos hijos, una vez más vengo a pedir que el mensaje que di en Heede sea difundido a todo el mundo.

Debido al desinterés espiritual de la gente y a sus vidas placenteras, mis mensajes de Heede fueron despreciados, ocultados y arrojados al olvido y, como consecuencia, ocurrieron tantos castigos, especialmente la Primera Guerra Mundial y todas las demás guerras.

Si mi mensaje de Heede no se da a conocer al mundo, me veré obligado a soltar el brazo de mi Hijo con un castigo formidable sobre todas las naciones.

Es necesario que los pueblos del mundo conozcan mis mensajes y cambien de vida, de lo contrario el fuego del cielo que anuncié Akita caerá sobre el mundo entero.

Mi pequeño hijo Marcos, que es mi última esperanza, lleva varios años difundiendo mis mensajes de Heede, pero ni siquiera esto avanzó porque la dureza del corazón humano y el desinterés espiritual por todo lo celestial ha llegado a tal punto que los propios ángeles se quedan petrificados ante tal dureza. Deben ayudar al justo (mi hijo Marcos). Necesito que ayuden al que trabaja para mí para que pueda dar realmente mi mensaje de Heede a todo el mundo. Así que ayuda a mi hijo Marcos en esta misión y mi Hijo Jesús recompensará generosamente en el Cielo a todos los que lo hagan.

Seguid rezando el Santo Rosario todos los días. Y recordad, hijitos: Yo no puedo salvaros si vosotros no queréis. Decid, pues, «sí» a mi plan de amor y a mi Corazón Inmaculado, para que verdaderamente pueda conduciros a todos a la salvación, al Cielo.

Difundid Mis lágrimas y mensajes de Naju.

Ahora os bendigo amorosamente a todos desde Fátima, Montichiari y Jacareí».