lunes, 9 de abril de 2018

Mensaje de Nuestra Señora Reina de la Paz a Edson Glauber

Hijo mío, la santidad es aprender a hacerlo todo unido a Dios. Es permitirle que ame a través de ti, es permitirle que actúe utilizándote como quiera.

La santidad es el camino del amor y del perdón, es ese camino donde encontrarás la

Es ese camino donde encontrarás el Corazón de mi Hijo Jesús, que siempre está esperando para guiarte a través de las pruebas y dificultades de la vida.

El Corazón de mi Hijo es manso y con paciencia os perdona y os enseña, para ver vuestras almas curadas de todas las heridas y resplandecientes con la luz de la gracia.

Muchos de vosotros no os preocupáis de buscar los bienes espirituales, sino sólo los materiales. Muchos corazones no están abiertos a la vida de la gracia en Dios, porque están agobiados por las vanas preocupaciones del mundo.

Muchos de mis hijos dejan este mundo sin haber tenido nunca una experiencia profunda del amor de Dios, porque el enemigo los ha llenado y asfixiado con tantas vanidades, concupiscencias, lujurias y deseos inicuos. Ha conseguido que el amor de Dios sea desterrado de estos corazones como ese deseo y esperanza de obtener el cielo y la vida eterna.

Cada amanecer es una llamada continua de Dios a la conversión de cada alma, de cada corazón. No pierdas más tiempo pecando y alejándote del Señor. No perdáis la oportunidad que Él os da de un nuevo día para la conversión, para la santificación de vuestras almas.

El alma orgullosa nunca comprenderá los misterios de Dios, ni tampoco el alma impura. Sed santos, sed puros, sed de Dios, Pureza Eterna y Majestad Infinita. ¡Os bendigo!