Mis queridos hijos,
¿Qué os está pasando? ¿Qué os motiva? ¿Hacia dónde vais? Os dejáis manipular por los que están en el poder y no os levantáis. Los que están en el poder son hombres, y Yo soy vuestro Dios. No os dejéis manipular por las autoridades que os silencian, que no quieren Misas con motivo del aniversario de la muerte de los fieles! Ellos no les gustan las Misas, y defenderlas en aniversarios es un primer paso hacia la defensa habitual de todas las Misas.
¿Qué fiel, bueno o menos bueno e incluso malo, no se presenta ante el Tribunal Divino en el momento de su muerte en la tierra? Todo creyente fiel tiene derecho al Juicio de Dios, y aquellos que lucharon por Él durante su vida en la tierra serán reconocidos como justos en el Cielo. Dos jefes de estado lucharon, uno contra la Masonería y otro contra el comunismo, ambos son organizaciones luciferinas y anticatólicas. Sed católicos también, Mis hijos, y no os inclinéis ante los enemigos de Cristo Rey.
Ellos han tomado poder en la tierra, pero eso no les quita el poder al Rey del Cielo y de la Tierra. “Su reinado no tendrá fin” (Lc 1:33). Él reina eternamente tanto en la tierra como en el cielo, y establecerá Su Reinado en la tierra cuando renueve todas las cosas. Sí, ese tiempo está cerca, y el Renacimiento terrenal se manifestará cuando “el diablo será encadenado por mil años” (Apoc 20:1-3). Esos mil años son un número muy largo de años, incluso más allá de mil años. Antes de eso, este perverso y odioso diablo se manifestará a través de la destrucción de almas y estados, guerras y todo lo que pueda destruir la creación de almas y cuerpos. Cuando un estado está al borde de la quiebra, busca desviar la atención, trasladar su problema a una causa distinta a su propia mala gestión.
Esto es el caso en muchos países de Europa, que, con déficit debido a una gestión intencionalmente catastrófica, no tendrán otra solución más que desviar la atención hacia un problema aún más grave: un desastre causado por alguien distinto a ellos mismos, y ¿quién podría ser eso? Hacerse esta pregunta es responderla, y oís hablar diariamente de guerra y discordia. Las personas preocupadas por el equilibrio y la estabilidad son perseguidas y removidas de sus puestos de servicio, aunque se preocupen por una buena gestión de su país. Los buenos son derribados y los incompetentes promovidos.
¿Quién se comporta así? ¿Es esta la manera correcta de actuar? No, hijos míos, Dios no actúa así. Él anima a los santos y los santos se ponen a su servicio. Poneos todos al servicio de vuestro Dios practicando virtud, adorándolo con dignidad, contemplación y fervor.
El catolicismo parece haberse dividido en dos; hay quienes, según criterios humanos, son llamados tradicionalistas y modernistas. ¿Realmente creéis que esto es lenguaje divino? El lenguaje divino es claro, preciso y sin sombra alguna. Yo mismo dije: "Yo soy el camino, la verdad y la vida" (Jn 14:6). Los que me aman y siguen por el Camino de la Verdad tendrán Vida. No hay dos caminos, ni medias verdades o divergencias en mi Lenguaje; fui crucificado por blasfemia porque osé hablar la Verdad sobre mí mismo.
Hijos míos, no os desgarréis, estudiad vuestra religión: solo hay una Verdad, un Camino y una Vida. La Santa Iglesia Católica ha explicado y difundido esto ampliamente a lo largo de los siglos, y cuando los hombres en las más altas posiciones de responsabilidad cambian estas leyes, el pueblo se pierde. El Papa San Pío X desarrolló este tema extensamente en su encíclica "Pascendi Domini Gregis" del 8 de septiembre de 1907, y debemos escuchar y seguir la palabra papal. Lo que era verdad ayer sigue siendo verdadero hoy, y si la verdad cambia, es porque después de cambiar ya no es la Verdad.
El pueblo está en una gran crisis; ha perdido su rumbo, ha perdido a sus líderes, ya no hay quienes mantengan la verdad como se mantuvo en el pasado y guíen a su rebaño hacia el verdadero bien. Las naciones están arruinadas y la Iglesia Católica ha perdido un gran número de fieles. Francia es ridiculizada debido a líderes incompetentes y perjudiciales. Francia ahora es apóstata; ya no es cristiana. Se ha secularizado e infectado por otras religiones extranjeras.
Sed orgullosos, hijos míos, de vuestros orígenes. Por el bautismo sois hijos de Dios. Tenéis una filiación envidiable entre todos los demás. Os está prometido un futuro extraordinario. Sed luces que brillan en la oscuridad. Sed faros en la oscuridad del paganismo. Sed héroes de Dios, quienes nunca os abandonarán.
Y yo estoy orgulloso de mis hijos fieles, de mis hijos que se mantienen firmes, de mis hijos que luchan y no se dejan vencer, de mis piadosos hijos que han comprendido la importancia de la oración, la caridad y la fe.
Os bendigo, queridísimos e amadísimos hijos míos, os amo y os sostengo. En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo †. Amén.
Vuestro Señor y vuestro Dios
Fuente: ➥ SrBeghe.blog