miércoles, 29 de noviembre de 2023

¡Estoy verdaderamente cansado de tu indiferencia hacia Mí!

Mensaje de Dios Padre a Myriam Corsini en Carbonia, Cerdeña, Italia, el 27 de noviembre de 2023

¡Yo soy Quien Soy!

Estoy aquí para manifestar Mi gran dolor por esta Humanidad sorda y ciega.

¡¡¡Aquí estoy, soy Quien Soy!!!

Soy Yo, el Dios Creador, ¡pronto Me conoceréis en Mi Justicia! He aquí que vendré y pondré fin a todo mal. La Obra de Dios es Una, y Dios no perderá nada de lo que está en Su Plan.

Amad a Mis criaturas:

volved vuestros corazones hacia Mí, sed devotos de Mí, no hay más dios que Yo: ¡¡¡Yo Soy!!! ¡Meditad todos, meditad! No esperéis a que llegue la hora mortal sin poneros en Mí para que os favorezca Mi Ayuda. Como Hijos de Dios tenéis la obligación de respetarme, de amaros, de asemejaros a Mí: ¡habéis sido creados por amor y con amor, y amor deseo de vosotros! Perdonaré a todos aquellos que pidan Mi perdón con verdadero arrepentimiento de corazón. El pecado es la causa de vuestra ruina, hijos míos: apartaos de esta enfermedad, buscad la pureza, entrad en el conocimiento de que Dios es vuestro único bien, vuestra única felicidad, ... todo lo que el monstruo os presenta está caído, no tiene ningún bien, os arrastra con él al Infierno. ¡¡¡Un viento impetuoso anunciará la proximidad de Mi ira!!!

Estoy verdaderamente cansado de vuestra indiferencia hacia Mí, estoy decepcionado por vuestras elecciones alejadas de Mí, os habéis convertido en híbridos, vuestro corazón se ha vuelto gélido, mostráis, sin freno, vuestra maldad hacia vuestros propios hermanos. El imperio del Mal se derrumba, Roma perderá su encanto, su belleza de antaño, cuando yacía en el seno del Padre.

Amados hijos:

estáis a un paso del precipicio, ¡abrid los ojos, mirad lo que hay en el mundo! Está sucio, apestoso a causa de los pecados que comete esta Humanidad. ¡No veo arrepentimiento! ... ¡Pobre Humanidad!

Qué tristeza en Mi Corazón:

Qué Padre ... Me gustaría tanto abrazaros a Mí, estrecharos fuertemente contra Mi Seno, haceros sentir los latidos de Mi Corazón que palpita en infinito amor por vosotros, pero vosotros... ¡no queréis Mi Amor! Preferís las riquezas de este mundo, buscáis tener más y más; tomáis de los pobres para enriqueceros, ¡me traicionáis! Me ofendéis ... dándome las ofrendas desechadas: ¡os lo quedáis todo para vosotros! Ah, ¡qué dolor!

Qué dolor, Hijos Míos, veo que en vuestro interior seguís prefiriendo las cosas del mundo, pero.... todo os lo quitaré; nada os dejaré... y vuestra suerte será dolorosa.

Mis pobres Hijos:

¿de qué os servirá ... haber saqueado aquí en la Tierra ... sólo para perder vuestra propia vida? La justicia del hombre hacia su Creador

es un bálsamo para el corazón... es motivo de salvación. Por eso, adornaos conmigo:

sed puros, abrid vuestros corazones al Dios que salva. ¡Ya es la hora!

¡Todo se precipitará de repente!

¡Pobre Humanidad!

Origen: ➥ colledelbuonpastore.eu