jueves, 19 de octubre de 2023

¡Los Países de la Tierra Pedirán Mi Amistad!

Aparición del Santo Arcángel Miguel el 17 de octubre de 2023 en la Casa Jerusalén a Manuela en Sievernich, Alemania

Hay una gran bola de luz dorada flotando en el cielo, así como una bola de luz dorada más pequeña sobre nosotros. Una hermosa luz desciende hacia nosotros. La gran bola de luz dorada se abre. San Miguel Arcángel sale de la luz dorada. Está vestido con una armadura blanca y dorada y lleva un escudo y una espada en las manos. Lleva una radiante corona de príncipes en la cabeza. San Miguel Arcángel se acerca y habla:

"¡Que Dios Padre, Dios Hijo y Dios Espíritu Santo os bendigan! Quis ut Deus? ¡Permaneced firmes en la fe! ¡Permaneced fieles a las enseñanzas de vuestros padres de la fe! Vengo a vosotros en amistad. Que yo venga a vosotros, así como la aparición del Señor, son dones de Dios. Una vez más os digo ¡Los países de la tierra pedirán Mi amistad! Mi espada golpeará la tierra.

El Diabolos es el confundidor y no se aclara. Intenta sembrar dudas en tu corazón. Como hizo con Eva: ¿Dios dijo realmente ...? ¿Es esto realmente un mandamiento de Dios? ¿Acaso Dios no mira sólo al amor?

Queridos amigos, Dios es amor y también es orden. Pues existe un cielo y, por desgracia, también un abismo. El Amor mismo, el Eterno, Él no cambia. Así que vengo a vosotros en nombre de Mi Señor. En el nombre de Mi Señor Jesucristo. En el nombre de Su Preciosa Sangre. ¡Si supieras lo preciosa que es la Sangre de Cristo! No te confundas. Te harán creer que eres libre, pero éste es el camino hacia el abismo. Sin embargo, ¡el amor de Dios te libera y te conduce al Cielo! ¡El Cielo quiere que rechaces el pecado! Por eso, vengo a ti para protegerte, pueblo amado del Señor. Para que no os perdáis».

Ahora la esfera más pequeña se abre y veo a Santa Juana de Arco saliendo de una hermosa luz. Santa Juana lleva una armadura radiante. Mira amorosamente a San Miguel Arcángel y se sitúa a Su derecha. Su aparición es más pequeña. En sus manos lleva un gran cojín de flores de lis rojas. Sobre estas flores de lis rojas está abierta la Vulgata (Sagrada Escritura). Veo el pasaje bíblico Jeremías 12:7-13:

"Lamento de Dios

Abandonada he mi casa, desechada mi posesión. En manos enemigas entregué la querida de mi corazón. Mi propiedad se alza contra mí como un león en el bosque. Levanta un rugido contra mí; por eso me repugna. Mi propiedad es un pájaro de plumas de colores. Las aves de rapiña se agolpan a su alrededor. ¡Reuníos, todas las bestias del campo! ¡Venid a ser devoradas! Muchos pastores desolan mi viña, pisotean mi propiedad, hacen de mi graciosa heredad un páramo desolado. Lo convierten en un erial. Ante mí llora el desierto. Devastada está toda la tierra. Nadie se da por aludido. Sobre todas las alturas de la estepa irrumpen los desoladores. Pues el Señor tiene una espada que arrasa de un extremo a otro. Ninguna criatura se salva. Siembran trigo y cosechan espinos; se afanan, pero no consiguen nada. Se avergüenzan de sus cosechas a causa del furor de la ira del Señor».

Habla Santa Juana:

"¡Tened valor! ¡Esta es la palabra de Dios, que tiene su validez en la eternidad! Yo he luchado por ella. ¡El pueblo debe mantener el valor y la fe! Vengo a fortaleceros. Dios me ha entregado a vosotros. El Diábolo quiere destruir muchas cosas y endurecer el corazón del pueblo. Serán Dios para sí mismos y harán pasar sus propios pensamientos por pensamientos y mandamientos de Dios. Pero el mundo es el mundo y no Dios. El tiempo de la confusión es breve para vosotros, ¡tenedlo en cuenta! Quien es fiel, el cielo le pertenece por toda la eternidad».

Santa Juana mira con amor a San Miguel Arcángel. San Miguel Arcángel nos mira a todos durante largo rato y luego dirige su mirada hacia el cielo. Luego levanta Su espada hacia el cielo y habla:

"¡Deus semper vincit! ¡Haz el bien, reza, sacrifícate! En este tiempo tiene lugar la gran purificación. Quis ut Deus?

Que Dios Padre, Dios Hijo y Dios Espíritu Santo os bendigan. Amén».

San Miguel Arcángel vuelve lentamente a la luz y desea que concluyamos con la oración de San Miguel Arcángel. Santa Juana de Arco también vuelve lentamente a la luz.

Rezamos:

«San Miguel Arcángel, defiéndenos en la batalla. Sé nuestra protección contra la maldad y las tentaciones del demonio. «Que Dios se lo ordene», imploramos. Pero tú, jefe de las huestes celestiales, arroja al abismo del infierno a Satanás y a los demás espíritus malignos que vagan por el mundo para corromper a las almas, con el poder de Dios. Amén».

San Miguel Arcángel y Santa Juana de Arco desaparecen.

Este mensaje se anuncia sin perjuicio del juicio de la Iglesia Católica Romana.

Derechos de autor.

©

Origen: ➥ www.maria-die-makellose.de