Mensajes de diversas orígenes
jueves, 1 de junio de 2023
Reza por América
Mensaje de los Ángeles Custodios de Milwaukee a Valentina Papagna en Sidney, Australia, el 28 de mayo de 2023

Cuando esta mañana empecé a rezar el Ángelus, apareció el Ángel y dijo: «Valentina ven conmigo. Nuestro Señor Jesús quiere revelarte una noticia no muy buena».
De repente nos encontramos en una zona donde había muchas casas. Empezamos a pasar por estas casas, visitando a mucha gente. Estas personas eran muy amables, y conocimos a más gente a medida que pasábamos por las casas. El Ángel dijo: «Todas éstas son buenas personas y orantes».
De repente apareció otro Ángel. Dijo: «Valentina, ven conmigo. Quiero mostrarte unos escritos que Nuestro Señor Jesús quiere que veas y que te sean revelados».
Entramos en una casa, y allí vi una pequeña mesa. El Ángel trajo entonces lo que parecía un fajo de periódicos doblados, de color bronce claro, y los colocó sobre la mesa.
Me dijo: «¡Todo esto son malas, malas, malas noticias, nada bueno!». El Ángel me dijo esto mientras hojeaba los periódicos mostrándome todos los titulares.
Pude ver un subrayado muy grueso al final de muchos de los mensajes de estos periódicos, subrayando su importancia. Entre estos mensajes, pude ver una bella imagen de Nuestro Señor Jesús vestido con una túnica totalmente roja. Nuestro Señor parecía triste. Intenté leer de qué trataban los mensajes, pero no pude, pues el Ángel los hojeó rápidamente.
El Ángel dijo: «Todo Mandamiento de Dios está roto, como un vaso roto». En una visión, el Ángel me mostró un vaso roto y dijo: «Mira este vaso, está roto, y se hace muchos pedazos, y ya no se puede remendar. Este lugar está condenado. La gente desobedece a Dios y le ofende tanto».
Empecé a preocuparme y pregunté al Ángel: «¿Dónde estoy? ¿Cómo se llama este lugar?»
El Ángel respondió: «¡Esto es América! América!»
Le pregunté: «¿Qué hago en este lugar?».
El Ángel respondió: «Son noticias muy graves y tristes. Reza por esta nación».
Mientras salíamos de esta casa, al aire libre, me fijé en una hermosa iglesia antigua que había a mi derecha, no lejos de donde estábamos. Era muy antigua y de piedra.
Le dije al Ángel: «Estas personas son muy agradables y simpáticas. Antes de irme, vendré a despedirme de esta gente».
Le pregunté al Ángel: «¿Estas personas están vivas o son almas?».
El Ángel respondió: «Son personas reales. Están vivas».
De repente apareció un grupo de ángeles, unos seis o siete. Eran muy amables y dijeron: «Valentina, vamos a enseñarte cómo nos comunicamos con la gente utilizando las manos y no hablando».
Entonces los ángeles me enseñaron alegremente las señales manuales que utilizan para comunicarse con las almas.
Después de la enseñanza, pregunté a los ángeles: «Todo está bien, pero ¿cómo se llama este pueblo?».
Con una sola voz, todos respondieron: «¡Milwaukee! Somos los ángeles que protegemos este lugar y a sus habitantes. Rezad por ellos».
Gracias, Santos Ángeles. Señor Jesús, ten piedad de América.
Yo sólo soy el mensajero de nuestro Señor y entrego este mensaje. Por favor, reza por esta nación.
Origen: ➥ valentina-sydneyseer.com.au
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